miércoles, 5 de junio de 2013

Ideales de clóset



Todo el mundo tiene una opinión acerca del señor Justo Orozco. Yo tengo la mía pero, - citando una frase en Facebook que leí hace unos días- “Mi opinión cambia conforme adquiero nueva información”.

Con esto no vengo a decir que me agrade, no, creo que preferiría ver Teleclub 24 horas seguidas o asistir a un stand-up de Nel López antes de conocer a este individuo.

Pero hoy, después de leer los comentarios con respecto al debate que propició Telenoticias mi percepción cambió, se hizo más extensa. Les voy a explicar por qué.

Solía creer que Justo Orozco era un ser despreciable  luchando por lo que él cree que es correcto. El problema es que ingenuamente  no me di cuenta que tiene tantos seguidores como detractores ¡Genio! Descubrí  el agua tibia.

Lo anterior me hizo pensar que estamos en un momento histórico,  imaginemos que es previo a cuando Rosa Parks decidió no entregar su asiento en el bus, aquel primero de diciembre de 1955.

Es hora de que todos los que tenemos un pensamiento más abierto, que hemos dejado el dogma impuesto por la religión y por las estructuras sociales hagamos lo mismo, no le demos el asiento a Don Justo y ese poco de gente que lo eligió. Esa gente que cree que la sociedad no evoluciona, que todo es cuadrado.

Los cambios inician por un poco de personas que se atreven a pensar diferente, yo mismo he sido objeto de una transformación en la forma de ver el mundo, primero definido por el dogma de la Iglesia, después la Universidad me puso a cuestionarme cosas y finalmente la ciencia y conversaciones interesantes con gente que piensa similar me hicieron formarme un criterio, pero eso tomó 28 años.

En Costa Rica es difícil decir lo que uno piensa, por más libertad de expresión, siempre hay presiones sociales y discusiones que uno se quiere evitar. En el ámbito que sea, preferencias sexuales, religión, fútbol, color político, críticas al país, entre otras.

Un buen amigo no creyente, me dijo una vez: “Yo aprendí que en este país hay que ser un ateo de clóset”, yo me pregunto ¿Quiénes más están en el  clóset? Acá quiero aclarar que no tiene que ver con la solicitud de Don Justo para que otros diputados salgan del clóset.

En el clóset no sólo están los homosexuales quienes reprimidos por una sociedad sexista  se cohíben de ser quien son, también estamos los heterosxuales que aunque decimos que apoyamos el matrimonio homosexual jamás iríamos a una marcha para apoyar a algún amigo que busque obtener los mismos derechos que tenemos mi novia y yo para formar una familia. A mí que no me vean en eso, ¡La vacilada que le pegan en el trabajo! ¡Quedás marcado como un playo!

Escondidos por ahí están los que se cuestionan cosas, a veces basadas en el sentido común, que no expresan lo que piensan por la represión de una tradición religiosa, de una tradición machista y retrógrada.

Pero ahí vamos, la lucha no puede claudicar, el sentido común, la ciencia y el bienestar ciudadano deben prevalecer sobre las diferentes creencias, pero eso empieza desde nosotros mismos, aunque sea publicando memes en Facebook, al rato y eso lleve a alguien a hacerse preguntas.

1 comentario:

  1. Excelente reflexión...En el país de quedar bien nadie puede decir directamente lo que piensa...

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